Ermita del Santísimo Cristo de la Salud

 


La ermita del Cristo de la Salud se encuentra en el límite norte del casco histórico de Valdemoro, entre la calle homónima y las denominadas Negritas, General Martitegui y Río Manzanares. Tiene una plaza frente a su fachada principal y en su entorno inmediato se generó un espacio público que contenía las escuelas y luego aula de música, llamado Parque Cristo de la Salud. Históricamente, esta zona extramuros de Valdemoro estaba constituida por las eras y diversas huertas y fincas de recreo, como la de Cánovas en el siglo XIX, y la ermita era el primer elemento de Valdemoro al acceder por el primi­tivo Camino Real a Aranjuez. 

Entorno de la Ermita a finales del siglo XIX

La nave central, de cuatro tramos, está acom­pañada en tres de ellos por seis capillas laterales simétricas comunicadas entre sí y separadas del espacio central por pilastras toscanas y arcos de medio punto, del mismo modo que sucede en la capilla mayor, de ancho menor que la nave. Ésta se cubre con bóveda de cañón con lunetos separados por arcos fajones, iluminada por huecos abiertos en dichos lunetos, y las capillas con casquetes. Está rematada la central del lado septentrional con cúpula, del mismo modo que la capilla mayor, sobre pechinas y con linterna, y además, ambas aparecen gallonadas; en esta capilla existe un retablo del Santo Cristo, barroco, con columnas salomónicas y estípites. En el testero, tras el altar mayor, se añade un pequeño espacio abovedado elevado con acceso por una escalera que constituye un retablo camarín barroco, cuyo antecedente directo era el exis­tente en la capilla de Atocha de Madrid, de Juan Gómez de Mora. 

Plata general

El exterior presenta un atractivo juego volu­métrico propiciado por los distintos momentos constructivos de la obra y por el contraste de los materiales: revestimiento original con yeso en muros y cubierta de teja curva cerámica, desdi­bujado por el zócalo de piedra añadido y la cornisa corrida de ladrillo que oculta los canalones. La portada original tenía dos espadañas laterales, pirámides sobre el arranque de la cubierta y cruz en la cumbrera marcando la simetría junto a un balcón y la puerta con arco de medio punto. Se reformó desacertadamente en el último tercio del siglo pasado añadiendo dos edificaciones laterales que permiten el paso por un arco central hasta el acceso primitivo de la ermita, que imponen un volumen y unos elementos formales totalmente ajenos a la ermita original. 

Sección longitudinal

Constructivamente, los muros de carga origi­nales -cabecera- se realizan de mampostería y mortero de cal sobre zanjas corridas de cimen­tación de grandes bolos de piedra y mortero similar; los muros laterales de la nave fueron sustituidos en la reforma por fábrica de ladrillo macizo de dos pies y los machones de las capi­llas se realizaron con un encofrado perdido de fábrica de ladrillo de medio pie y mampostería en su interior, que sostienen los arcos formeros que separan las capillas de la nave, los arcos fajones de la bóveda central y las vaídas de las capillas laterales. Dichas bóvedas -cañón de la central, casquetes de las capillas- se realizan con hormigón calcáreo sobre encofrado. La cubierta a dos aguas se organiza mediante armadura de par e hilera y teja cerámica curva. 

Vista de las capillas

Se desconoce el momento de su erección ni origen; se denominó Ermita del Cristo de la Sangre, del Santo de la Sangre, de la Veracruz -ya existente en 1650- y su cofradía se consti­tuyó en 1721. Su origen sería un humilladero que, según testimonios históricos, obtuvo indul­gencias del Cardenal Mendoza en el siglo XV y diversos historiadores de la villa fechan su naci­miento en este momento y le asignan como la primera iglesia de Valdemoro. Seguramente a finales de este siglo o comienzos del XVI se cons­truiría el primer santuario. A finales del siglo XVI, en 1575, recibe un legado para su "engrande­cimiento" y en 1614 una herencia para su repa­ración, ambas realizadas por la familia Correa.

Vista del interior hacia camarín

La capilla actual es una construcción sufra­gada por la Cofradía de la Veracruz, tras la aprobación de sus ordenanzas en 1650 por el arzobispo de Toledo, asentada junto al antiguo camino real a Toledo y compuesta por un núcleo de estilo barroco de mediados del XVII con un humilladero de una nave que sería la actual capilla mayor, agrandado posteriormente por un camarín al norte y una nave meridional. En 1668-9 es dibujada por Pier María Baldi con ocasión del viaje de Cosme de Medicis a España; 

Valdemoro en el siglo XVII
Se aprecia en primer término la ermita del Cristo de la Salud y detrás a la derecha, la iglesia parroquial.

aparece en este documento gráfico la ermita elevada en un pequeño altozano en el momento anterior de la construcción del camarín y de la nave, pues se puede colegir de la imagen el volumen del humilladero en primer término, cubierto a cuatro aguas y coronado por una linterna, seguramente de una cúpula interior, con elementos menores adosados a su fachada occidental. Alrededor, muy destruido y con forma de escuadra, se repre­senta un muro de fábrica que rodea el edificio. 

Hasta la reforma de la segunda mitad del siglo XX el espacio arbolado de entrada -jardín se denomina en 1923-, frente a la fachada prin­cipal, se encontraba cerrado por una verja de forja. Este recinto abarcaba, a su vez, el alzado meridional de la ermita y los septentrionales de las casas que lo cerraban por el sur. 

Ermita del Cristo de la Salud, antes Cristo de la Sangre.
Años 40

Ermita del Cristo de la Salud, antes Cristo de la Sangre.
Años 60

Fue restaurado el edificio en 1913 y en los años 60, pero a mediados de la década de los 70 del pasado siglo su estado de conservación era lamentable, por lo que fue prácticamente reconstruida en 1975 con proyecto de Emilio Ariznavarreta y Casimiro Población, que intro­ducen una zona de acceso bajo el coro de gran tamaño, así como la nueva fachada, dos viviendas y un salón social. 


La imagen del Cristo de la Salud fue destruida durante la Guerra Civil, y la actual réplica de la misma es del ano 1941, el retablo-camarín que lo alberga fue restaurado recientemente. 


Procesión del Santísimo Cristo de la Salud, saliendo del convento de las monjas Clarisas. 
Año 1915

Procesión por la plaza de la Constitución
Años 50

En procesión, saliendo de la ermita
Años 60


En la actualidad se ha acotado el recinto de la ermita y remodelado su entorno; en 1991 se reformó y amplió el Parque del Cristo de la Salud, con un nuevo cerramiento, ajardinamiento y templete de música.

Está incluida en el Registro General de Bienes de Interés Cultural del Ministerio de Cultura como Monumento Histórico Artístico, y goza de protección integral dentro del Catálogo de Bienes y Espacios Protegidos.






Música: El Cristo de la Salud - Manuel López Farfán

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