Miguel de los Santos San Martín



Miguel de los Santos, periodista y escritor, nació en Valdemoro el 30 de julio de 1936 y allí pasó su infancia y una parte de su adolescencia, hasta cumplir los 16 años. 


Histórico presentador de radio y televisión muy conocido por haber sido conductor de grandes programas musicales tanto en la Cadena SER como en TVE. Además, fue comentarista del Festival de Eurovisión entre finales de los años 70 y principios de los 80.


Miguel desarrolló su carrera como guionista y presentador en la Cadena Ser y TVE, medios en los que sus programas alcanzaron gran popularidad. Ha recibido numerosos reconocimientos a su dilatada labor profesional a través de galardones tan prestigiosos como el premio Antena de Oro extraordinaria (2002), el Micrófono de Oro (2012) otorgados por la Federación de Asociaciones de Radio y Televisión de España a los profesionales más destacados en el campo de la industria audiovisual o el Premio Iberoamericano de Periodismo 2022.


Su implicación con Valdemoro, le llevó a elegir la Biblioteca Municipal Ana María Matute para presentar su primera novela, "El fabuloso mundo de Mateo Benavides" (2019), y dos años después "Cabalgando sobre un caballo de cartón".


En febrero de 2021 Miguel de los Santos donó al Consistorio un histórico piano (1) que las Brigadas Internacionales regalaron en 1939 al padre del locutor, Gregorio de los Santos, quien fue secretario del Ayuntamiento. Por expreso deseo de Miguel, la pieza regresó al mismo lugar que ocupó durante años, quedando ubicada presidiendo el vestíbulo del Teatro Municipal Juan Prado.


El 30 de septiembre de 2022, fue nombrado Hijo Predilecto de la Villa de Valdemoro en pleno del Ayuntamiento por unanimidad de los miembros de la Corporación. Su trayectoria profesional y la vinculación que siempre le ha unido con el municipio, más allá de por su origen valdemoreño, fueron los motivos principales que el Gobierno tuvo en cuenta para impulsar su nombramiento. 
Este título honorífico, recogido en el Reglamento de Honores, Distinciones y Precedencias del Consistorio, fue el segundo otorgado en la actual etapa democrática, uniéndose al cantante, compositor y productor también nacido en Valdemoro David Santisteban.


(1) El itinerante piano llegó a las manos de Gregorio de los Santos cuando se lo entregó el oficial al mando de una compañía norteamericana enviada por el general Roosevelt e integrada en las Brigadas Internacionales en apoyo de la República, el mismo día que se batían en retirada, en señal de reconocimiento al trato que sus tropas habían recibido de los habitantes de Valdemoro durante el tiempo que habían permanecido en la localidad. 
El entonces secretario del Ayuntamiento de Valdemoro, Gregorio de los Santos, compaginaba esta labor funcionarial con la de propietario de las primeras salas de proyección del municipio, como el emblemático cine Alarcón, y empresario teatral por lo que el instrumento sirvió para realizar el acompañamiento musical de numerosos espectáculos mientras De los Santos mantuvo arrendado el teatro que se levantaba en la actual ubicación del Juan Prado.

David Santisteban Marcos



El artista, cantante, compositor y productor David Santisteban nació en Valdemoro  el 17 de enero de 1974, que ha paseado siempre el nombre de Valdemoro por cualquier rincón de España o del mundo por donde su trabajo le ha llevado.

"Aunque fueron muchas las señales, los detalles y las pistas que desde bien pequeño me empujaron a abrazar la música, fue a los 14 años cuando tomé la decisión de negociar e intercambiar con mi madre el viaje de fin de curso por una guitarra que aún conservo."


A los 17 años cuando empezó a editar sus primeras canciones entre España, México y Argentina para artistas juveniles, componiendo incluso para spots comerciales y sintonías para Televisa TV, preludio de las más de cuatrocientas canciones ya editadas.

A partir de los 90 se centró en España donde arrancó a trabajar y a componer con artistas como su amigo David Demaría, con el que escribiría mano a mano muchos de los éxitos de otros interpretes: Tamara, Malú, Los Caños, Manuel Lombo, incluyendo el tema "Más Mujer" interpretado por Marta Sánchez y Malú, sumergiéndome en esos años, entre otros estilos, en un tipo de canción profunda y desgarrada que le regalaría diferentes singles con Malú: "Diles", "Si estoy Loca", "Enamorada", "Nadie", entre otros muchos temas de sus discos.

A partir del 2000 llega Operación Triunfo, programa propulsor de muchos álbumes superventas. Entonces desarrolla gran parte del repertorio de los discos de ese fenómeno social, en sus varias ediciones, grabando sus canciones artistas como David Bisbal, David Bustamante, Manuel Carrasco, Gisela, Mario, Alejandro Parreño, Nuria Fergó, Soraya Arnelas, Sergio Rivero, Hugo Salazar.

Tras esta etapa, se centró en la creación de las canciones inéditas que darían vida a los Musicales ALADDIN y PETER PAN en español, que a su vez quedan grabadas en dos álbumes que Warner y Vale Music editarían respectivamente.

En 2008, firmó gran parte de las canciones que Pastora Soler graba en sus distintos álbumes, obteniendo cómo autor de su primer single "Quién" el Premio al Mejor álbum de canción española en la XII Edición de los Premios de la Música. Recibiendo doblemente otro galardón en la siguiente Edición.

En los años sucesivos y hasta hoy, sigue componiendo para intérpretes/artistas como algunos de los citados anteriormente, y otros como Sergio Dalma, Abel Pintos, Mira Awad, Manu Ríos , Marco Mengoni ó Luis Fonsi.

En su carrera como compositor, Santisteban ha cosechado dos Premios de la Música, y ha sido nominado a los Grammy Latinos 2013 por el trabajo "Otras verdades", para India Martínez. Ha compuesto temas para Malú, David Demaría, Tamara, David Bustamante, Pastora Soler o Sergio Dalma y ha trabajado con reconocidos autores de Méjico, Argentina, Londres o Miami.


Goya 2015 concedido por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España por la canción original Niño sin miedo, tema principal de la película "El Niño", dirigida por Daniel Monzón.

Su implicación con Valdemoro le llevó a colaborar en el disco "La voz del agua", editado por el Ayuntamiento a beneficio del Cuerno de África y para el que compuso la canción que le da título y que interpreta David Demaría. Además, para la grabación de la canción "Dime", interpretada por India Martínez, y en cuya composición intervino Riki Rivera, alquiló el estudio de grabación municipal del Centro Cultural Juan Prado.

David, India Martínez y Riky Rivera en su estudio de Valdemoro

El Pleno del Ayuntamiento de Valdemoro aprobó el 17 de abril de 2015, nombrar a David Santisteban Marcos ‘Hijo Predilecto' de la villa por su excelente trayectoria profesional y por su calidad humana. Este título honorífico, recogido en el Reglamento de Honores, Distinciones y Precedencias del Consistorio, era el primero que se otorgaba en la actual etapa democrática.

Pleno de Valdemoro - 17/04/2015

Teatro Municipal Juan Prado 02/05/2015 
Homenaje al músico y compositor David Santisteban al que otorgó el título de ‘Hijo Predilecto' de Valdemoro



Música: "La Voz del Agua"








Estrella de Elola y Folgueira - Fernando Osorio y Elola



Estrella de Elola nació en el año 1872. Benefactora de personas desfavorecidas, se caracterizó por su generosidad con los más necesitados, convirtiéndose en una de las vecinas y benefactora más ilustres del municipio.

Se casó con el diplomático Fernando Osorio y Elola, no teniendo descendencia.

Fueron los propietarios de la casa que actualmente es sede del centro ocupacional. El edificio fue una construcción típica de casa de veraneo en Valdemoro, una de tantas casas solariegas que jalonaban la trama urbana valdemoreña desde 1800 y hasta bien entrada la centuria pasada (1).


Fernando fue secretario en Londres en 1892, ministro residente en Montevideo (1905-1907), El Cairo (1907-1908 y 1908-1912), designado ministro residente en Estocolmo (1908) y ministro plenipotenciario y enviado extraordinario en Lima, Sucre y Quito (1912). Posteriormente, fue nombrado por Alfonso XIII enviado extraordinario y ministro plenipotenciario ante la reina Guillermina y el gran duque de Luxemburgo el 10 de febrero de 1913. Tras algo más de tres años de misión en La Haya, presentó la dimisión el 1 de abril de 1916. Se jubiló seis años después, el 3 de abril de 1922, falleciendo en el año 1930.

Fernando Osorio y Elola

En el año 1932, el consorcio puso el nombre de Estrella de Elola a la calle Grande de Valdemoro, para homenajear a Estrella que gozó de gran reconocimiento en la sociedad valdemoreña en las décadas de los años veinte y treinta del siglo pasado XX.

Estrella falleció en el año 1940, a los 68 años de edad.

Calle Estrella de Elola - Años 40 (Calle grande hasta 1932)

Fotografía de la calle Grande - Años 60
Vista desde Plaza del Paraiso. 
Tapias de la Casa de Luis García Ortega. 
Al fondo los cipreses de la antigua casa de Estrella de Elola. 

En el año 2021, se procedió a la instalación de una placa conmemorativa en la fachada de la que fuera su residencia.

(1)  José Rodríguez Alonso, alcalde de Valdemoro de 1902 a 1904 y Pablo Soler Soler, embajador en Alemania, Japón, Argentina o Francia, fueron otros notables propietarios del edificio hasta los años 40 del pasado siglo, momento en que la finca pasa a formar parte del patrimonio municipal. Reconvertido el edificio en centro ocupacional de minusválidos primero y centro de día después ha conservado intacta su exquisita estructura arquitectónica.







Fuentes: Archivo General del Ministerio de Asuntos Exteriores (Madrid), Histórico, Personal, leg. 210, exp. 11625.
Staats Almanaak (1914), pág. 52, y (1916), pág. 50; J. P. Alzina, Embajadores de España en los Países Bajos, Madrid, Ministerio de Asuntos Exteriores, 2004, pág. 103

Música:  J. S. Bach Lute Sonatas & Partitas


Producción agropecuaria, agricultura, industria y comercios en el siglo XVIII.


En el siglo XVIII no destacó la Villa de Valdemoro por su producción agropecuara, no existiendo además, ni casas de campo ni alquerías. 

Respecto a la agricultura, a mediados del siglo XVIII contaba con tierras de secano (cebada y trigo). Viñas y olivo, plantados hacia 1785 entre 8 y 10.000 pies de olivar, 500 frutales y 30 álamos negros de propios de la villa.

La ganadería era escasa, pues no llegaba ganado de esquileo, destacando las 3.200 cabezas de ganado lanar de los padres de San Jerónimo y Compañía de Jesús, así como 380 de ganado caballar y mular.

Respecto a la industria existía en este momento un batán de agua sin uso y otro de viento arruinado, un molino de aceite del convento de las Clarisas, un pozo de nieve de la parroquial (con vivienda) y otro destruido; más adelante la situación mejoró gracias a la fábrica de paños finos -a comienzos de su existencia se le comparó con las de Segovia, Guadalajara y Béjar- a la que hay que añadir en 1785 diversas canteras de yeso negro y blanco para exportación y una fábrica de yeso mate (en esta fecha, sin embargo, sólo se mantienen algunas hilanderas de la fábrica textil).

Disponía la villa en 1751 de un prado concejil, dos casas, carnicería, abacería, casa bodegón, 53 claros en la plaza para arrendarse en tiempo de feria, una barca sobre el río Jarama entre Ciempozuelos y Bayona.

No había tabernas públicas del Concejo, pero sí de propiedad privada (4 mesones), 22 panaderías y una tahona; mantenía la feria anual de 20 días y el privilegio de mercado todos los domingos del año, aunque las propiedades y tributos no eran suficientes para el mantenimiento del camino de Aranjuez y la composición de las fuentes del común, entre otras necesidades. 

En esta fecha, asimismo, se sufragaban dos hospitales, uno para enfermos pobres con cuatro camas, con dos hermanos, llamado de la Concepción, y otro, el de San Andrés, para recoger viudas y ancianas, sin camas- además de una preceptoría de gramática y una escuela de primeras letras, fundadas por el conde de Lerena.


El desarrollo urbano de la villa se muestra en el variado comercio, alguno suntuario -seis tiendas de mercería, un confitero, un estanquero, 22 panaderías, 4 mesoneros, tres pasteleros, un bodegonero y dos carniceros- así como en las profesiones que sustenta, que cubren tanto los servicios de una gran villa como los artesanales y los eclesiásticos, todos ampliamente representados -dos abogados, un administrador de las Reales Salinas de Espartínas (situadas en Cíempozuelos), dos escríbanos, un médico, dos cirujanos, un sangrador, un boticario, dos sacristanes, un maestro de primeras letras, un agrimensor, tres arrieros, 12 fabricantes de yeso, dos hortelanos, tres aguadores, un calesero, 15 trajíneros, 8 albañiles, 7 albéitares, 8 herreros, un espartero, tres cuchilleros, 21 zapateros, 4 sastres,
4 carreteros, carpinteros, un calderero, un cedacero, un curtidor, un polvorista, un jalmero, 8 molederas de chocolate, dos esquiladores, 9 cardadores para la Real Fábrica de San Fernando, un cerero y 63 eclesiásticos, incluyendo los religiosos carmelitas y franciscanas-. 


Es interesante la importancia que cobran los oficios relacionados con la propia carretera -arrieros, caleseros, trajineros, carreteros, herreros- mientras que los dedicados a la actividad agropecuaria son mínimos -hortelanos, herreros, albéitares, esquiladores-; es destacable el número de albañiles -ocho- y la existencia de carpinteros, que indica un cierto desarrollo del oficio frente a la autoconstrucción generalizada en el mundo rural. 









Valdemoro reivindica la Fuente de la Villa como Bien de Interés Patrimonial

19 de julio de 2022



La Iglesia parroquial Nuestra Señora de la Asunción ha sido el punto de partida de la visita que la consejera de Cultura, Turismo y Deporte, Marta Rivera de la Cruz, ha realizado hoy a Valdemoro donde fue recibida por el alcalde, Sergio Parra. Tras recorrer el templo junto a la comitiva de la que formaban parte la directora general de Patrimonio Cultural, Elena Hernando, la primera teniente de alcalde, Raquel Cadenas y la concejala de Cultura, Nieves Pérez, se desplazaron a pie hasta la Fuente de la Villa, monumento que está a la espera de que la Comunidad de Madrid lo declare Bien de Interés Patrimonial.


Lourdes Almendros, responsable de Patrimonio, fue la encargada de explicar los tesoros que alberga la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, que es el edificio más importante del conjunto monumental del municipio.

Monumento Histórico Artístico desde 1981 cuenta, además de su magnífica arquitectura de estilo barroco, con un importante patrimonio como el retablo del altar mayor, con obras de Goya y los hermanos Bayeu, de Claudio Coello y los frescos de Antonio van de Pere. En la iglesia también destaca el órgano que data de 1737, incluido en el Inventario de Bienes Muebles del Estado y cuya restauración concluyó en 2006.


Según explicó la archivera municipal, Mª Jesús López Portero, gracias a la riqueza documental que alberga el Archivo Parroquial se ha podido trazar casi con exactitud la genealogía del jesuita Diego de Pantoja (1571-1618), uno de los personajes más carismáticos de la historia valdemoreña.

Ya en la Fuente de la Villa, segundo punto de la visita, el alcalde instó a la consejera a acelerar los trámites para que el monumento y el antiguo Lavadero municipal sean declarados Bien de Interés Patrimonial, solicitud aprobada por unanimidad en el Pleno celebrado el 30 de julio de 2020.


La fuente de tres caños, construida en piedra de Colmenar en 1605, es uno de los emblemas más característicos del municipio. Está coronada por el escudo de armas de la Villa, la representación heráldica más antigua conocida y fue acometida por el Concejo de Valdemoro con motivo de la celebración de la feria comercial del siglo XVII, privilegio concedido en 1603 por el rey Felipe III. Junto a ella se encuentra el Lavadero. Los pilones donde iba a confluir el agua sobrante de la Fuente de la Villa ya eran utilizados a mediados del siglo XIX como lavadero público hasta la llegada del agua corriente a las casas en la década de los 70 del pasado siglo.


En recorrido por los municipios de Pinto, Valdemoro y Ciempozuelos, la consejera ha destacado el valor patrimonial e histórico del Sur de la Comunidad de Madrid que ‘oculta tesoros que se han conservado y debemos preservar e incorporar a la oferta turística- cultural de la Comunidad de Madrid’.



Fuente: larevistadevaldemoro.com

Fernando III y los 42 mojones entre Pinto y Valdemoro



Entre Pinto y Valdemoro apenas discurre un tramo de la autovía A-4 de 7 kilómetros entre unos campos en los que figuradamente se agolpan todos los indecisos, vacilantes o medio borrachos , según la definición de esta frase hecha de la Real Academia Española.

Ni siquiera hay rastro de ningún riachuelo que corrobore el relato más conocido sobre el origen de esta famosa expresión. Según la versión popular, un borracho de Pinto que se encontraba por estos parajes empezó a bailotear y a saltar a uno y otro lado del regato gritando «ahora estoy en Pinto» , «ahora en Valdemoro» hasta que al final tropezó y cayó al río diciendo: «Ahora estoy entre Pinto y Valdemoro».


«No pondría yo la mano en el fuego para testificar la existencia del tumbacuartillos del cuento», subrayaba Jaime Campmany en 1993 en su artículo sobre el « El Quid de unos dichos », donde apuntaba otra de las versiones que relacionan esta expresión con el refrán «Vino tinto, si no lo hay de Valdemoro, démelo Pinto».

Siglos atrás debieron ser los caldos de estas dos localidades habituales en las tabernas madrileñas, explica Gregorio Doval en «Del hecho al dicho» antes de añadir que «hay quien afirma que lo que hubo entre estas dos localidades fue un asilo de dementes, y que la expresión equivalía, originalmente, a "estar loco"»


Lo que sí hubo en la linde entre Pinto y Valdemoro fueron 42 mojones colocados por orden de Fernando III el Santo (1199-1252) para delimitar la línea divisoria de Madrid y Segovia. «Durante largo tiempo la aldea de Pinto es objeto de disputas territoriales entre el obispo de Palencia y las ciudades y tierras de Segovia y Ávila con Madrid; unos contenciosos que dan lugar a las intervenciones de distintos monarcas con los consiguientes deslindes, uno de los cuales tiene que ver, probablemente, con la popular frase de " Entre Pinto y Valdemoro "».

Alfonso VII

Alfonso VII fue el primero en ordenar estos deslindes entre ambas poblaciones en 1184, mandato que sería ratificado posteriormente por el rey Alfonso VIII en un documento de fecha 20 de julio de 1208, estableciendo los límites de los concejos de Segovia y Madrid, confirmado posteriormente por otro documento, de fecha 12 de diciembre de 1208, en el que establece los límites fronterizos entre Madrid, Toledo y Segovia, con el fin de garantizar la comunicación de Segovia a través de la cañada de Alcorcón, que a su vez cruzaba Pinto por lo que hoy se llama calle Real. Pero el problema no se resolvió, ya que Segovia y Madrid seguían la disputa.

Fernando III

Finalmente, el 20 de junio de 1239, el conflicto obliga al rey Fernando III el Santo a intervenir y dictar un Privilegio en San Esteban de Gormaz, cuyo documento original se encuentra en el Archivo General de la Villa de Madrid y que se reproduce en el presente artículo, y asigna Pinto a Madrid y Valdemoro a Segovia y ordena colocar 42 mojones para señalar el deslinde.


«Queriendo departir contienda, é baraja grande que era entre ellos, departíles los términos por estos lugares que esta carta dice, y puse y fice estos mojones: el primer mojón fue este cerca de la atalaya asomantes de geles, el segundo mojon a la renconadilla que está á Palomero...», 

escribe el monarca fijando uno a uno los 42 hitos entre ambas localidades para limitar Madrid y Segovia.


El mismo Fernando III supervisó personalmente la colocación de los mojones que marcaban el deslinde entre ambas provincias, alojándose entre los dos pueblos, en la Casa de Postas situada en aquel lugar y aprovechando, de paso, la degustación de los quesos y vinos que por aquel entonces eran famosos y su deseo de no desairar a ninguno de los dos, que competían por ser sus anfitriones ofreciéndole los mejores caldos y viandas. Por esa razón, cuando alguien preguntaba en la Corte de Madrid dónde estaba el rey, los cortesanos contestaban «Fernando III optó por comer con los representantes de las dos villas "entre Pinto y Valdemoro"», lo que con probabilidad dio origen a la famosa frase

Para Margarita Candón y Elena Bonnet, autoras de «A buen entendedor...», el origen del dicho se remontaría a la convivencia entre musulmanes y cristianos en época de la Reconquista. Señalan éstas que Pinto fue conquistada por los cristianos antes que Valdemoro y que en esta época surgiría la expresión, aunque el arroyuelo al que se refieren como frontera no aparece en los mapas y Pinto fue conquistada en el mismo año 1083 en el que datan la toma de Valdemoro.



Música Renacentista Laúd




El único Escuadrón de Caballería de la Guardia Civil



El caballo es el animal que ha acompañado a la Guardia Civil durante toda su existencia y del que se han servido los guardias para desempeñar su necesaria actividad durante más de un centenar de años. En su concepción se trató del único medio de transporte que existía, y su presencia se extendía a todos los puestos de la Guardia Civil repartidos por el territorio nacional. Con el avance de la tecnología y la implantación de nuevos medios de transporte motorizados, el caballo pasó a ocupar funciones más concretas en las que todavía hoy sus virtudes son mayores respecto a las de los vehículos más actuales.

Poca gente conoce es que la Comunidad de Madrid acoge al único Escuadrón de Caballería de la Guardia Civil, ubicado en Valdemoro desde los años 80. Aunque no siempre fue así. Originalmente, estaba enclavado en la zona de Atocha en Madrid, pero la expansión de la capital requirió de una nueva ubicación cerca del campo donde pudiera tener unas instalaciones mayores.


Los orígenes de esta institución se remontan a 1844, con el Duque de Ahumada al frente. Por aquel entonces, el caballo está presente en el servicio diario de la Guardia Civil como medio fundamental de una de las dos únicas especialidades de las que se componía el Cuerpo, coexistiendo dos armas fundamentales: Infantería y Caballería. Las Unidades de Caballería estuvieron presentes en todo el territorio nacional, así como en las provincias de ultramar (Cuba, Santo Domingo, Puerto Rico y Filipinas).


Durante el primer tercio del siglo XX, y debido al incremento de la conflictividad social en España, la Caballería adquirió una importancia mayor en el servicio de la Guardia Civil. Terminada la Guerra Civil Española, se integraron la Infantería y Caballería en una sola, desapareciendo la Caballería como tal. El caballo se mantuvo como un elemento más de transporte en los Puestos y Destacamentos de la Guardia Civil. Esta decisión provocó la paulatina desaparición de la Guardia Civil a caballo en el paisaje de la geografía española.


A pesar de ello, quedó como representante de las Unidades de Caballería un Escuadrón ubicado en Madrid que fue creado en 1934 en el seno del 14º Tercio. Este fue vinculado en 1958 en la 1ª Comandancia Móvil, compatibilizando su misión como Fuerza de Orden Público con la propia de una Unidad de Honores.

A partir de entonces, concentraron en el Escuadrón los caballos que permanecían desplegados por toda España. Esta acción quedaría concluida a finales de 1988, fecha en la que ya había sido trasladado a Valdemoro.


En el año 1998, el Escuadrón de Caballería pasará a depender directamente del coronel jefe de la ARS, ya con entidad de grupo, manteniendo por tanto hasta fechas actuales del Siglo XXI dicha conformación singular, ya integrada en una Unidad Superior de espíritu y estructura de Unidad de Control de Masas.


Para poder desplazarse de forma autónoma y rápida a cualquier lugar de España, disponen de «una flota de camiones adaptados para el traslado de caballos, personal y equipos, así como diferentes tipos de furgonetas y vehículos todo-terreno, con capacidad para desplazar, si fuera necesario, la totalidad del Escuadrón de manera simultánea.


El Escuadrón de Caballería lleva a cabo servicios de una tipología muy variada. Por un lado, realizan labores de restablecimiento del orden público y control de grandes concentraciones de masas, como en festivales o romerías como El Rocío, en cuyos casos, actúan de manera conjunta y coordinada con las Unidades de Infantería. Por otro lado, se encargan de la protección y seguridad de altas personalidades, así como de la seguridad ciudadana. También participan en la protección y auxilio de peregrinos en el Camino de Santiago. 


El Escuadrón es una de la Unidades más representativas de la Guardia Civil, por lo que es habitual su presencia en desfiles y actos oficiales del Cuerpo. La más emblemática de sus actuaciones es la participación en el desfile el Día de la Hispanidad, pero también está presente en los actos conmemorativos de la celebración el día de su patrona en la ciudad que corresponda o en actos de acompañamiento a personalidades. 


El Escuadrón de Caballería se instaló en el Colegio de Guardias Jóvenes de Valdemoro hace casi cuarenta años. Por su proximidad al municipio, tradicionalmente los vecinos han tenido la posibilidad de disfrutar de su presencia en actos como procesiones o el Corpus Cristi, actos que no gozan de tal privilegio en otras localidades del país. Todavía hoy, mayores y pequeños pueden observar desfilar a los jinetes de la Guardia Civil en dos ocasiones, el Corpus Christi y la Cabalgata de los Reyes Magos.

Los miembros del Escuadrón están repartidos por la geografía española sirviendo de apoyo a sus compañeros del Cuerpo y mejorando la seguridad de todos los ciudadanos. Es un orgullo saber que el epicentro de tan necesaria actividad se encuentra en Valdemoro.

La Guardia Civil a caballo en la plaza de la Constitución de Valdemoro - 1985

Fuera de las situaciones de emergencia y las operaciones especiales, su actividad varía con la temporada del año. Durante el invierno, coincidiendo con la recogida de los cítricos en la Comunidad Valenciana y la aceituna en Andalucía y Castilla-La Mancha, están inmersos en la campaña de prevención de robos en explotaciones agrícolas del Ministerio del Interior. Con la llegada del verano, también prestan apoyo en las campañas de prevención de incendios forestales en Galicia y en espacios naturales protegidos donde se producen grandes concentraciones de ciudadanos. En concreto, en nuestro municipio, colaboran con el Ayuntamiento de Valdemoro, al cual prestan diferentes servicios, así como prácticas por las vías pecuarias y rurales del termino municipal.

Infanta Elena preside el acto de inauguración de la Pista Cubierta del Escuadrón de Caballería de la Guardia Civil 
(Valdemoro-2012)

Cada guardia civil tiene adjudicado su propio caballo y esta asignación se hace con el fin de que el jinete y el caballo tengan la mayor afinidad posible. Para ello, se tienen en cuenta las peticiones de los propios agentes y las cualidades y temperamento del caballo.


Dentro de la unidad no solo hay grandes profesionales del trabajo policial a caballo. De su pasión por el equino han nacido también grandes deportistas que han formado un equipo de salto y otro de raid. Los equipos, compuesto por ocho componentes aproximadamente cada uno de ellos, entrenan cuando el trabajo se lo permite y participan tanto en competiciones civiles como militares.





Fuente principal: madrilanea.com
Audio: Escuadrón de Caballería de la Guardia Civil, 172 Aniversario de la fundación del Cuerpo